
La isla española de Ibiza limita la entrada de vehículos para aliviar la masificación turística

La isla española de Ibiza limita desde este domingo y hasta septiembre el número de vehículos de visitantes, en un intento de reducir las molestias derivadas del gran número de visitantes que recibe este paraíso turístico del mar Mediterráneo.
Entre el 1 de junio y el 30 de septiembre, sólo podrán circular diariamente por la isla 20.000 vehículos de no residentes, de los cuales 16.000 serán de alquiler, de la flota de la isla, y 4.000 de particulares, que tendrán que registrarse previamente. Las caravanas, además, deberán tener una plaza reservada en un camping y ya no podrán estacionar en cualquier lugar en el campo.
Las motos estarán excluidas de las limitaciones.
La restricción de vehículos es "un punto de inflexión" para "garantizar la sostenibilidad" de la isla, escribió el presidente del gobierno insular de Ibiza, Vicent Marí, en un artículo publicado este domingo en El Periódico de Ibiza y Formentera.
"Es cierto" que "muchos sectores han manifestado su oposición hasta el punto de trabajar para que no se pueda aplicar: desde grandes navieras hasta multinacionales del sector del alquiler de vehículos", prosiguió.
Pero "por encima de ello", añadió, prevalece "el interés general de una isla que ha manifestado de forma mayoritaria su voluntad de regular y controlar unos flujos insostenibles" de turismo.
Según el Diario de Ibiza, las empresas de alquiler de coches habían solicitado tener en circulación 10.000 vehículos más por día de los 16.000 que finalmente les han autorizado.
La entrada de vehículos en Ibiza, que tiene 160.000 habitantes y se recorre de punta a punta en coche en una hora, se ha cuadriplicado este siglo, de los 51.000 de 2001 a los 207.000 en 2022, según datos oficiales.
Con esta medida, Ibiza se suma a otra isla del archipiélago de las Baleares que restringe la entrada de vehículos, Formentera, más pequeña aún. Está previsto que Mallorca haga lo mismo a partir de 2026.
Unos 19 millones de turistas visitaron las islas Baleares en 2024, según estadísticas oficiales. De ellos, 3,6 millones visitaron Ibiza y Formentera.
El turismo en el mundo volvió ese año a los niveles anteriores a la pandemia de Covid-19. España, donde el turismo supone el 13% del PIB, recibió una cifra récord de 94 millones de turistas en 2024, siendo el segundo país del mundo en número de visitantes después de Francia.
En diversos puntos del país, como las islas Baleares, Barcelona, las islas Canarias y Andalucía, han crecido en los últimos meses movimientos de protesta contra el turismo, al que culpan, principalmente, de la escasez de vivienda y de la precariedad y estacionalidad de los empleos.
J.Kalinski--GL