Gazeta Lodz - Los rugbiers franceses acusados de violación comparecen ante la fiscalía de Mendoza

Los rugbiers, que llegaron a Mendoza (oeste) el jueves de noche tras un viaje por tierra con una comitiva policial desde Buenos Aires, "están ya con la fiscalía", dijo a la AFP el vocero del poder judicial provincial, Martín Ahumada.

Auradou, de 20 años, y Jegou, de 21, fueron acusados de violar y golpear a una mujer de 39 años en esta provincia limítrofe con Chile tras un amistoso contra los Pumas argentinos el sábado.

Luego del partido, los jugadores fueron al bar Beerlin donde consumieron una gran cantidad de alcohol, según dijo un mozo del lugar que pidió no revelar su identidad. "Se tomaron todo", contó.

No obstante Andrés Civit, dueño del Beerlin, dijo a la AFP que actuaron "como cualquier otra persona de consumo habitual". "No sé si se emborracharon, no vi a nadie arrastrándose", añadió.

Natacha Romano, abogada de la denunciante, relató que su clienta conoció a Auradou en otro club nocturno adonde acudieron los jugadores después, ya en la madrugada del domingo, y se fue con él al Diplomatic Hotel.

Tras entrar a la habitación, él "la agarra, la tira en la cama, la empieza a desvestir y salvajemente la golpea", detalló Romano.

Con "violencia feroz" abusa sexualmente de ella al menos en seis ocasiones. Una hora después entró Jegou y "de forma salvaje comienza con los mismos hechos", añadió la abogada.

La mujer "tiene marcada la espalda, mordeduras, rasguños, golpes en los pechos, en las piernas y en las costillas", además de un puñetazo en la cara.

El abogado defensor Rafael Cúneo -hermano del ministro de Justicia, Mariano Cúneo- asegura que la relación fue consentida y que los rugbiers "desconocen absolutamente los golpes".

Auradou y Jegou fueron detenidos el lunes en Buenos Aires para evitar que salieran del país. El jueves fueron trasladados de una celda de Interpol de la policía federal argentina a un centro de detención en Mendoza para comparecer en la audiencia de imputación ante la fiscal Cecilia Bignert.

Tras escuchar los cargos los acusados pueden declarar o no, según ellos dispongan, pero seguirán detenidos.

"Sí o sí quedan detenidos, salvo que la defensa presente algo y un juez le haga lugar", explicó Ahumada, y aclaró que pueden declarar cuando lo deseen, "en cualquier momento del proceso".

- Descompensación general -

Si son hallados culpables, las jóvenes promesas del deporte francés arriesgan de ocho a 20 años de prisión.

La abogada afirmó que podrían ser imputados también por privación de la libertad, porque "no hay un solo delito para investigar".

El jueves, la denunciante fue hospitalizada tras sufrir un trastorno del ánimo llamado "hipotimia" y "una descompensación general del cuerpo producto de todo lo sucedido", dijo Romano.

"Cuando vio los informes se angustió, entró en un estado de shock total y se desvaneció, sobre todo por las lesiones que mostró la tomografía", detalló al medio local Radio Uno.

Nicolás Yungman, psicólogo del Hospital de Emergencias Psiquiátricas Alvear y quien no está vinculado al caso, explicó a la AFP que la hipotimia a la que se refirió Romano "puede ser un efecto del trastorno de estrés postraumático (...) que provoca que la persona no pueda expresare bien, tenga movimientos lentos, lenguaje inexpresivo y pérdida de interés".

Cúneo, el abogado de la defensa, dijo a periodistas el jueves que usará como indicios de consentimiento el hecho de que ella subió con Auradou a la habitación 603 y esperó a que él bajara a recepción para pedir la llave, que había perdido. La mujer era "una señora de 40 que ya sabe lo que pasa en la vida", estimó el letrado.

También pedirá "un domicilio con un tutor para que" los dos rugbiers "puedan ser alojados en ese domicilio", y argumentará que "no existe el peligro de fuga".

Entretanto, la selección francesa continúa su gira: jugó contra Uruguay el miércoles y se enfrentará de nuevo a los Pumas el sábado en Buenos Aires. Tres no estarán: los dos detenidos y Melvyn Jaminet, excluido por haber hecho comentarios xenófobos en redes sociales durante la fatídica celebración en Mendoza.

K.Radomski--GL