
Tras 17 años, millones de cigarras de la camada XIV emergen en EEUU

La última vez que estos insectos de ojos rojos y zumbido característico brotaron de la tierra en suburbios y bosques de Estados Unidos fue en el verano de 2008. Ahora, la camada XIV de las cigarras conocidas como periódicas está resurgiendo en el sur del país.
Informes de la aplicación científica participativa "Cigarra Safari" muestran que los primeros insectos de esa generación, que emergen del suelo cada 17 años, han comenzado a salir. A medida que la temperatura del terreno se vaya elevando hacia el norte, se espera que aparezcan millones más.
Estos animales de cuerpo oscuro y alas amarillentas pertenecen al orden de los hemípteros, junto a chinches, ácaros de los colchones y pulgones.
Sin embargo, a menudo se los confunde con las langostas, un error que se remonta a los primeros colonos ingleses de Estados Unidos que compararon su aparición masiva y ruidosa con las plagas bíblicas.
Existen aproximadamente 3.500 especies de cigarras en todo el mundo, muchas de ellas aún sin nombre.
Pero las cigarras periódicas, que dependiendo de su camada emergen en masa después de 13 o 17 años, son exclusivas del este de Estados Unidos, aunque hay dos especies adicionales no relacionadas en el noreste de la India y Fiyi, según Chris Simon, destacado experto en esos insectos de la Universidad de Connecticut.
Esta generación XIV se documentó por primera vez en 1634.
"Todo el mundo está fascinado por ellas, porque no se ve nada durante 13 o 17 años y, de repente, tu casa y tu auto se cubren de estos insectos", explicó Simon a la AFP.
"Es un fenómeno maravilloso que puedes llevar a tus hijos a ver y admirar, ver cómo salen de sus crisálidas y preguntarse cómo han evolucionado", añadió.
Instó al público a apreciarlas y no temerles: "El mundo no sobreviviría sin los insectos", defendió.
- "Criaturas de la historia" -
Debido a que sus años de aparición son escalonados, diversas generaciones de cigarras periódicas aparecen en diferentes años. En 2024, se produjo un raro "doble golpe" cuando la camada XIX, con frecuencia de 13 años, coincidió con la XIII, de 17.
Estos insectos desatan entusiasmo sobre todo en los científicos, que aún tratan de descifrar la lógica evolutiva detrás de sus ciclos de vida con números primos.
Las cigarras son apodadas a menudo "criaturas de la historia", ya que evocan recuerdos de capítulos pasados de la vida y aquello que se estaba haciendo cuando apareció la última generación.
Por ejemplo, la vez anterior que la camada XIV emergió, en 2008, la inestabilidad financiera mundial iba en aumento, los iPhones eran un artículo de lujo y George W. Bush aún era presidente en Estados Unidos.
- "Rezagados" -
Las cigarras pasan casi toda su vida bajo tierra, pasando por etapas de vida llamadas "instares".
Luego excavan túneles hacia la superficie durante unas pocas semanas para mutar, reproducirse y morir, mientras que sus crías recién nacidas caen de los árboles y se entierran en el suelo, comenzando el ciclo de nuevo.
Los machos producen sus ensordecedores cantos de apareamiento con sus "timbales", membranas sonoras situadas a ambos lados del abdomen, en un coro que se ha comparado con sirenas o máquinas eléctricas.
No pican ni muerden, y en su forma adulta no comen alimentos sólidos, aunque beben agua.
En cambio, su defensa es su abrumadora cantidad: se agrupan en tal número que sacian a depredadores como aves, mapaches, zorros y tortugas, en un rol crucial para el ecosistema.
Pero su estrategia de supervivencia se ve cada vez más amenazada por los cambios provocados por el ser humano.
La deforestación y la urbanización generalizadas han destruido su hábitat. Y ahora el cambio climático ha provocado una mayor frecuencia de "rezagados", cigarras que emergen cuatro años antes o después de lo habitual.
A menudo lo hacen además en cantidades demasiado pequeñas para sobrevivir, lo que podría amenazar la población a largo plazo.
A esto se suma el clima político. Bajo la presidencia de Donald Trump, el gobierno federal ha despedido en masa a científicos y ha congelado la financiación para nuevas investigaciones.
Simon presentó en agosto pasado una propuesta de subvención a la Fundación Nacional de Ciencias para realizar un importante estudio genético sobre los relojes internos de las cigarras, mecanismos biológicos que de alguna manera registran el paso de los años, a diferencia de los ciclos circadianos de 24 horas de los seres humanos.
"Nadie sabe lo que está pasando", dijo, al lamentar estos recientes ataques a la ciencia.
A.Lewandowski--GL