
Israel quiere centrar la agenda internacional en la cuestión de los rehenes

Israel anunció el lunes que quiere poner la cuestión de los rehenes cautivos desde hace 22 meses en Gaza "en el centro de la agenda internacional", tras la publicación de unos videos que en los que se veía a dos de ellos demacrados.
"Eso debe estar en primer plano en la escena mundial", declaró a la prensa el ministro israelí de Relaciones Exteriores, Gideon Saar, en la víspera de una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU en Nueva York, convocada por Israel y dedicada a la situación de los rehenes.
"Me puse en contacto con mis colegas y les pedí que pongan de urgencia el tema de los rehenes en el centro de la agenda internacional", añadió.
De las 251 personas secuestradas por Hamás durante su ataque en Israel el 7 de octubre de 2023, 49 no han sido liberadas y de ellas 27 habrían fallecido, según el ejército israelí.
La publicación la semana pasada por Hamás y Yihad Islámica, su aliado, de tres videos que muestran a dos rehenes israelíes, identificados como Rom Braslavski y Evyatar David, conmocionó a Israel y reavivó el debate sobre la necesidad de alcanzar rápidamente un acuerdo para liberar a los cautivos.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, expresó "su profunda consternación" por las imágenes y pidió ayuda al Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) "para proporcionar alimentos" y "atención médica" a los rehenes.
Hamás exigió como condición "la apertura de corredores humanitarios (...) para el paso de alimentos y medicamentos" al territorio palestino, asediado y amenazado por el hambre, según la ONU.
- "Mil años de experiencia" -
Netanyahu, que enfrenta una fuerte presión en Israel para conseguir la liberación de los rehenes, anunció que convocará "esta semana" a su gabinete para "dar instrucciones" al ejército sobre "la manera de alcanzar los tres objetivos de guerra" que se fijaron para la Franja.
"Estoy aún más decidido a liberar a nuestros rehenes, erradicar a Hamás y garantizar que Gaza no vuelva a representar una amenaza para el Estado de Israel", dijo anteriormente.
Cerca de 600 exfuncionarios de seguridad de Israel, entre ellos varios exjefes del Mosad y de la agencia de seguridad interior -el Shin Bet-, pidieron al presidente estadounidense, Donald Trump, que presione a Netanyahu para poner fin a la guerra y traer de vuelta a los rehenes.
"¡Detengan la guerra en Gaza!", exhorta la carta, firmada por 550 exjefes de espionaje, militares, policías y diplomáticos, que llevan tres décadas en el centro de todos los secretos de Israel y que, "juntos, tienen más de mil años de experiencia en seguridad nacional y diplomacia".
Netanyahu "está llevando a Israel a la ruina y a los rehenes a la muerte", acusó el Foro de Familias de Rehenes, la principal organización de familiares de cautivos.
"La continuación de la guerra pone en peligro la vida de los rehenes, que ya se encuentran en peligro mortal inmediato. Hemos visto sus escalofriantes imágenes en los túneles; no sobrevivirán muchos días más de tormento", alertó.
"Desde hace 22 meses, se vende al público la ilusión de que la presión militar y los intensos combates traerán de vuelta a los rehenes", pero estos discursos "no son más que mentiras y engaños", estimaron los familiares de los rehenes.
- "Enorme regalo para Hamás" -
Gideon Saar volvió a arremeter el lunes contra países como Francia, Reino Unido y Canadá, que anunciaron su intención de reconocer un Estado de Palestina, lo que, según él, supone "un enorme regalo para Hamás".
"Estos países deben comprender las consecuencias de sus actos. Ya advertí (...) que reconocer un Estado palestino virtual acabaría con las posibilidades de alcanzar un acuerdo sobre los rehenes y el alto el fuego. Eso es exactamente lo que ocurrió", afirmó.
Varios periódicos israelíes citaron este lunes a un mismo responsable gubernamental anónimo, que afirmó que el gobierno está "comprometido en un diálogo con los estadounidenses, y la conclusión que se desprende es que Hamás no quiere un acuerdo".
"Por eso el primer ministro presiona ahora para liberar a los rehenes y, al mismo tiempo, obtener una victoria militar, combinada con la entrada de ayuda humanitaria en zonas fuera de las zonas de combate y, en la medida de lo posible, en zonas fuera del control de Hamás", explicó esta fuente.
El ataque del 7 de octubre causó del lado israelí la muerte de 1.219 personas, en su mayoría civiles, según un recuento basado en datos oficiales.
En represalia, Israel ha matado al menos a 60.933 personas en la Franja de Gaza, en su mayoría civiles, según datos del Ministerio de Salud del territorio, gobernado por Hamás, considerados fiables por la ONU.
U.Marciniak--GL