
Rusia propone prorrogar un año el tratado con EEUU de limitación de armas nucleares estratégicas

Rusia propuso este lunes prorrogar por un año el tratado de limitación de armas nucleares estratégicas New Start concluido entre Moscú y Washington, que expira en febrero.
Este texto, firmado en 2010, limita a cada parte a 1.550 ojivas estratégicas desplegadas -un 30% menos del tope establecido en 2002- y prevé un mecanismo de verificación.
Las conversaciones para extender el acuerdo se interrumpieron hace unos años por las tensiones a raíz del conflicto en Ucrania.
"Abandonar totalmente la legalidad de este acuerdo sería, desde muchos puntos de vista, un error", declaró el presidente ruso, Vladimir Putin, en una reunión transmitida por televisión.
"Para evitar provocar una carrera de armas estratégicas (...) Rusia está dispuesta, después del 5 de febrero de 2026, a seguir respetando las limitaciones cuantitativas centrales previstas por el tratado Start", agregó.
"Creemos que esta medida solo será viable si Estados Unidos actúa de manera similar y no toma medidas que socaven o violen la proporción actual de capacidades de disuasión", prosiguió el presidente ruso.
Rusia congeló su participación en New Start en 2023 pero continuó ateniéndose de forma voluntaria a los límites establecidos por el tratado.
- Agitar el tema nuclear -
Las negociaciones antiproliferación entre Rusia y Estados Unidos se degradaron en los últimos años, pese a que ambos países controlan más del 80% de las ojivas nucleares que hay en el mundo.
En 2019, Estados Unidos y Rusia se retiraron del tratado sobre Fuerzas Nucleares de Rango Intermedio (INF) que limitaba los misiles desplegados en Europa y databa de la Guerra Fría.
En 2023, Putin firmó una ley que revocaba la ratificación del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (TPCE), aunque Moscú afirmó que seguiría acatando la moratoria impuesta a las pruebas atómicas.
Rusia ha sido acusada de agitar el tema nuclear desde que envió tropas a Ucrania en febrero de 2022.
Días después de lanzar su ataque, Putin puso a sus fuerzas nucleares en alerta máxima. El año pasado, el dirigente ruso firmó un decreto que amplía las posibilidades de utilizar armas nucleares.
Las tensiones entre Moscú y Washington se redujeron desde que Donald Trump llegó a la Casa Blanca en enero pero ninguna de las partes ha entablado conversaciones de peso sobre la cuestión nuclear.
En agosto, Trump afirmó que iba a movilizar dos submarinos nucleares en respuesta a lo que describió como unas declaraciones "altamente provocadoras" del expresidente ruso Dmitri Medvedev.
S.Mazur--GL